Friday, November 10, 2017

JUEGO DE INQUISIDORES - 2ª Partida Campaña Shadow Wars Amageddon

El escenario es EL RAID del reglamento de SWA, para ser jugador como un Killteam de un único personaje, en este caso un asesino Eversor cuya misión es acabar con la vida de Ayesha Strabo, la hija del gobernador y una poderosa Pariah de nivel Omega.

He usado el terreno de Zone Mortalis para recrear la zona de la residencia del gobernador donde está confinada Ayesha. Para añadir más emoción existen dos celdas gemelas, ambas con un marcador que situé en secreto y que por tanto yo ignoraba. Solo uno de ellos es la verdadera Ayesha.

Todas las puertas se pueden abrir lanzando un D6 y obteniendo un resultado de 2+ con la excepción de las puertas de las celdas que están bloqueadas y deben ser destruidas. Poseen resistencia 6 y 3 heridas.
El Eversor comienza la partida en la parte superior del tablero. El defensor, en este caso la escuadra del sargento Torossian, despliega 1D6 centinelas sobre el terreno. Obtuve un resultado de 6 en la tirada y pude desplegar ese número de miembros del equipo. Entre ellos situé al Cabo Orgiva y al Ogrete Carnavas y dejé en la reserva los tres restantes miembros del equipo, incluyendo al Sargento. Estos últimos pueden entrar a partir del momento en que se dé la alarma obteniendo en un D6 un resultado igual o mayor al número de figuras que contiene cada grupo dejado en reserva, por tanto un resultado de 3+ al inicio de cualquier activación permite su despliegue.
Como reserva, dejé para el final la llegada de una sorpresa. Una última línea de defensa de gran poderío si todo lo anterior fallaba.
El Eversor comenzó la partida avanzando de forma normal para no quedar demasiado visible.
En el turno de los defensores llevé a cabo las tiradas para los centinelas, y todos ellos fueron especialmente suspicaces (superaron con resultados de 5 y 6 las tiradas para su movimiento), estrechando el cerco rápidamente sobre el intruso.
Corriendo el riesgo de ser descubierto, el Eversor avanzó hacia la sala contigua, ocultándose detrás de una esquina.
En el siguiente turno del defensor las tiradas fueron más dispares, algunos centinelas se distrajeron (resultados negativos permiten al atacante mover a los centinelas) pero uno de los más cercanos al Eversor se situó peligrosamente cerca de él.

Como dar la alarma se chequea al comienzo de cada ronda (tanto la del atacante como la del defensor) hice la tirada de detección. Obtuve un 3 que multiplicado por la iniciativa del centinela me daba 9", suficiente para poder ver al intruso. Pero al estar situado tras un obstáculo debía superar una tirada con 4+ para poder "ver" al Eversor. La tirada permitió al Eversor permanecer escondido.

La única forma de evitar la prematura alerta consistía en acabar con el centinela. Un disparo de agujas de la pistola ejecutor fue suficiente para dejar Down al Guardia, pero éste todavía podía dar la alarma si obtenía un 4+. Falló pero lamentablemente tuve que chequear para munición y fallé la tirada. La pistola ejecutor había agotado la munición de agujas. Un mal presagio.
Afortunadamente la siguiente ronda del defensor fue penosa y todos los centinelas quedaron distraídos, dando las espalda al Eversor o alejándose de éste. El centinela que estaba Down obtuvo un resultado de Out of Action en la fase de recuperación. Un impedimento menos para el Eversor.
Saliendo del pasillo el asesino encamino sus pasos hacia la gran sala que desembocaba en los accesos a las celdas.
Hasta ahora el Eversor había logrado controlar los efectos del Frezon (debe superar una tirada de Ld al inicio de su activación). Decidió encaminarse a la celda que tenia situada a su derecha. 
La ronda de vigilancia mejoró un poco las tiradas de control de los centinelas pero el guardia más cercano a las puertas la falló y se alejó dando la espalda a las puertas de acceso.
Vía libre para alcanzar la puerta de la celda.
Era el momento de dejar el sigilo de lado y comenzar la fiesta. En contacto con la puerta el Eversor activó la bomba de fusión.
La puerta saltó por los aires de inmediato quedando franco el paso al interior.
Alertados por la explosión (Tirada de 2d6 + fuerza del arma, con 10 o más salta la alarma. Obtuve un 6 que sumado a 8 era más que suficiente), los centinelas se activaron de inmediato. Casi todos corrieron en dirección al ruido.
El sargento y dos de sus hombres desplegaron de inmediato al ser dada la alarma, corriendo hacia las celdas mientras que el guardia que estaba más cercano abrió fuego sobre el Eversor pero sin conseguir impactarle.
Ansioso por acabar con su objetivo el Eversor penetró en la celda, revelando el marcador. Para su enojo la celda solamente contenía unos restos humanos. Su objetivo está en la celda continua pero sus enemigos ya estaban sobre el.
Lo estrecho del acceso solo permitió que el Sargento Torossian y dos de sus hombres abrieran fuego sobre el intruso.
A pesar de la inhumana agilidad del Asesino, éste recibió uno de los impactos, perdiendo una herida,  pero cargó contra uno de sus enemigos dejándolo Out of Action con su Puño Neuronal, (doblando su número de ataques de 4 a 8 por Frenesí y equipado con el Puño Neuronal que si impacta causa automáticamente 1 herida con modificación a la tirada de salvación de -1, el Eversor es una máquina de picar carne contra los Guardias Imperiales).
Llamando a la caballería pesada el Ogrete Canavas se lanzó al ataque en la siguiente ronda mientras sus compañeros permanecían a un lado expectantes (Error, error, error...)
Por un tiempo el sargento Torossian pensó que había obrado inteligentemente al ordenar al ogrete que cargará contra el Eversor, (El ogrete posee 4 ataques, incluyendo uno adicional por su escudo y una Fuerza mayor que la resistencia del asesino y además había cargado en ese turno.
No fue suficiente. El ogrete perdió una herida aunque logró aguantar una ronda más hasta que Torossian y Corvus se unieron al combate.
De nada sirvió, unos instantes más tarde ambos yacían al lado del corpachón del gigante caído. 
Carnavas y Torossian quedaron Out of Action y Corvus en Down.
Dejando atrás la refriega el Eversor se encamino hacia la salida de la celda, para encontrarse de frente con el lanzallamas que empuñaba el soldado Rim. 
Encajonado como estaba le fue imposible evitar el chorro ardiente de prometiun, perdiendo su segunda herida. Furioso aunque ignorando el dolor se lanzó sobre el soldado al que dejó Out of Action. La carga alcanzó también al cabo Orgiva a quién dejó también fuera de combate.

El camino hacia la otra celda había quedado expedito pero un retumbar rítmico y pesado precedía la llegada de una nueva amenaza. Nada más salir a la sala sus ojos se fijaron en un gigante de metal que se alzaba ante él. Su víctima debía ser alguien muy importante para que dispusiera de un guardián tan poderoso. (Sopresa, sorpresa: un robot Kastellan, activado bajo protocolo Aegis como último centinela de Ayesha Strabo).
La curiosidad se reflejó por un instante en la cara del Eversor para ser de inmediato sustituida por la furia que le imbuían las drogas de combate en su organismo.
De inmediato el Kastellan abrió fuego sobre el asesino.
Uno de los disparos de Blaster de Fósforo del Kastellan hizo literalmente papilla el cuerpo del asesino. Ayesha estaba a salvo.
El intento del imperio de acabar con la vida de la hija de Strabo había fracasado, salvo que Cómodo Van Rynn diera señales de vida, nada podría evitar la entrega de la muchacha a los sirvientes del Caos. Pero eso es otra historia.












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